La pandemia ha generado retos adicionales para la efectividad y respuesta de los actuales sistemas de gobernanza. La actual coyuntura ha acentuado algunos desafíos a la gobernanza que ya existían pero que hoy pueden tener consecuencias significativas; la falta de transparencia y de apertura de espacios de participación ciudadana pueden acentuar las barreras de desconfianza, de falta de articulación y confianza entre actores públicos, privados y de sociedad civil. Ante esta situación, el manejo transparente de las respuestas de los Gobiernos y la comunicación fluida y veraz con la ciudadanía son elementos de la gobernanza democrática que deben ser fortalecidos.
Durante este año hemos evidenciado que el Modelo de Involucramiento Ciudadano Participa + contribuye al fortalecimiento de los principios de gobierno abierto: transparencia, participación y rendición de cuentas a través de la innovación pública con el objetivo de fortalecer la comunicación permanente de las autoridades con la ciudadanía incluyendo desafíos, estrategias, resultados, promoviendo la co-creación de soluciones a retos públicos. Además el Modelo ha venido trabajando en el fortalecimiento de capacidades de liderazgos organizados que impacten y aporten valor público en lo territorios con el objetivo de fortalecer el capital social y promover mejores condiciones de desarrollo en el país.